En ocasiones elaboramos recetas que nos obligan a reservar alguna parte del huevo y después no sabemos muy bien qué hacer con lo que nos sobra. Cuando esto sucede siempre busco la manera de aprovechar todos los ingredientes al máximo, así que esta receta viene muy bien para cuando tenemos una gran cantidad de claras de huevo esperando en la nevera (no demasiado tiempo). O bien, podemos comprarlas en la tienda. Como prefiráis. El caso es que este postre es perfecto, además, porque admite cualquier fruta que tengamos por casa sin necesidad de tener que comprar una variedad determinada para el dulce. Sólo tenéis que pensar en que el sabor de las frutas casen entre sí y con el chocolate (si decidís añadírselo). Por lo demás, esta receta es bien sencilla. Seguro que os gusta.
Ingredientes:
Para el merengue:
- 8 claras de huevo.
- 280 g. de azúcar.
- 1 cucharadita de cremor tártaro.
Para la cobertura de chocolate:
- 250 g. de chocolate negro.
- ralladura y zumo de una naranja.
Para la nata:
- 200 ml. de nata para montar.
- 6 cucharadas de azúcar.
- 1 cucharadita de esencia de vainilla.
Para el decorado:
- 1 naranja.
- 1 pera.
- 1 granada.
- avellanas.
Elaboración:
Merengue:
1) Precalentamos el horno a 200º.
2) Montamos las claras con el azúcar y el cremor tártaro hasta que formen picos.
3) Sobre una bandeja de horno extendemos el merengue y horneamos a 150º durante una hora y cuarto.
4) Dejamos enfriar completamente.
Cobertura de chocolate:
1) Calentamos en un cazo el zumo de naranja a fuego bajo y añadimos el chocolate troceado. Mezclamos hasta que se derrita el chocolate y se integre bien con el zumo sin dejar de mover. Dejamos enfriar y reservamos.
Nata:
1) Montamos la nata con el azúcar y la vainilla.
2) Extendemos sobre el merengue enfríado.
Decorado:
1) Pelamos y cortamos la fruta.
2) Extendemos sobre la nata.
3) Vertemos el chocolate sobre la fruta.
4) Tostamos las avellanas en una sartén, o bien, a la vez que hemos horneado el merengue en una bandeja aparte. Las machacamos un poco y las extendemos sobre el chocolate.
Nota: mucho cuidado con que las avellanas se tuestes de más. Si las ponéis, que no estén muy negras, porque le quitan sabor a la tarta.
Fuente: adaptación de la receta original de Jamie Oliver.
Vaya cosita rica que nos presentas, me dejas con la babita caida!
ResponderEliminarUna receta riquisima, no conocía yo estas pavlovas... las fotos con la fruta y el chocolate negro, sensacionales. Ahora a disfrutarla...Besos.
ResponderEliminarsoy nueva en tu blog, y definitivamente me quedo!
ResponderEliminarbuenísima esta receta, además usando frutos de otoño, qué pinta!!!!!
Es una tarta que siempre digo que tengo que hacer y nunca me llega ese dia ,esta tuya se ve buenisima ,me tengo que animar
ResponderEliminarbesinos
oooooooh, y, encima, con granada.
ResponderEliminarMe ha conquistado!
Es una receta con mucho colorido y sabor!
ResponderEliminarSeguro que está riquísima!
Un beso.
Veda, debe estra riquísima con ese toque de chocolate por encima y muy util, como dices, para esas claras que a veces nos sobran de otros postres. Un besazo.
ResponderEliminarcosicasdulces.blogspot.com
Vamos que la última foto lo dice todo, una preciosidad te ha quedado y además muy completa y seguro que la granada enriquece además de decorar.
ResponderEliminarBesos.
GustoCocina - María G.
Gracias por todos los comentarios.
ResponderEliminarBesos.