Tarta de queso (sin horno)

Existen cientos de recetas de la tarta de queso, con huevos, sin huevos, con gelatina, con cuajada, tipo mousse, de chocolate, de café, de limón... y, básicamente, de casi cualquier sabor y forma que se nos ocurra. Así que esta que os comparto, es solo una de las muchísimas que podéis encontrar, sobre todo, de las más fáciles, ya que la crema de queso se hace con muy pocos ingredientes y dá poco trabajo, dando por resultado una tarta estupenda.

En mi caso, como tenía unas claras por la nevera, la decoré con un merengue que hice, pero esto no es lo habitual en la tarta de queso y solo fue una decoración que se me ocurrió para llevarla a una comida con amigos.

Espero que os guste la receta.

Ingredientes:

Medio rulo de galletas.

2 cucharada de mantequilla.

400 ml. de nata.

250 g. de queso de untar.

60 g. de azúcar.

4 hojas de gelatina para la crema.

200 g. de mermelada (fresa, frambuesa, frutas del bosque...).

2 hojas de gelatina para la cobertura.

Elaboración:

1) Trituramos las galletas y las mezclamos con la mantequilla derretida.

2) Lo extendemos sobre un molde y reservamos en la nevera.

3) En un cazo, calentamos la nata con el azúcar y sin que llegue a hervir, añadimos las cuatro hojas de gelatina, previamente hidratadas.

4) Añadimos el queso y mezclamos hasta que se integre completamente y no queden grumos.

5) Vertemos sobre la base de galletas y dejamos cuajar varias horas en la nevera.

6) Cuando esté cuajada la tarta, mezclamos la mermelada con un poco de agua y ponemos a calentar en un cazo o en el microondas.

7) Añadimos la gelatina, previamente hidratada, y dejamos enfriar un poco antes de verter sobre la tarta.